Burgos – 2012 – 89 x 116 cm
Marmolinas y pintura acrílica sobre lienzo.
360 €
Sólo un fragmento del rosetón de la fachada de Santa María, suficiente para plasmar la belleza de su forma. El detalle que muestra su delicada estructura, la geometría perfecta que me adentra en su ritmo curvilíneo.
Quisiera estar dentro, a su altura, y ver desde ahí las vidrieras atravesadas por un rayo de luz.